Hoy la información lo es todo, vivimos conectados a dispositivos que nos mantienen al tanto de todo lo que ocurre en el mundo. Estamos conectados a personas que viven alejados de ti, y sin embargo conocemos todo de sus vidas, de su cultura y sus costumbres, a través de lo que ellos mismos nos confiesan, la realidad del mundo ya no nos es indiferente y conocemos a través de la información todo de todos. Esto que en principio debería ser un progreso y provocar nuestra unión, en realidad provoca todo lo contrario.
Estamos tan informados que creemos que lo sabemos todo. Hoy no luchamos por la tierra, luchamos por la razón. Nuestras batallas son muy pequeñas, y aun así le dedicamos toda nuestra energía. Sacamos la artillería pesada a la mínima que alguien nos contradice o simplemente nos da su punto de vista, cargamos con violenta verborrea a la mínima, dejando siempre patente que pase lo que pase, nosotros tenemos toda la razón.
Luchar por la razón es perder sin lugar a dudas la guerra, ya que mostramos en esas insignificantes y ridículas batallitas, todas nuestras cartas, mostrando a la luz, que como estrategas no valemos absolutamente nada. Es poco inteligente, no saber escoger nuestras propias batallas, aquellas que merecen realmente la pena lucharlas y gastar esas energías de un modo constructivo, lo que demuestra, que las personas de la sociedad de hoy están muy informadas, pero muy poco formadas.
La educación de una sociedad basada en ser principalmente seguidor, fan o admirador, de un modelo con pocos valores sociales, provoca que ese perfil clonado acabe siendo replicado como un virus en la masa. La información se reduce a titulares, especulaciones, teorías y estudios, hemos adoptado la mentira y los contrastes extremos como un verdadero paradigma de la verdad.
Debemos comprender algo, alguien Informado, es alguien no formado, el prefijo In- es negativo, por lo tanto es igual a NO. Como lo es en Inmoral, para definir a alguien que carece de moral, Inculto, para definir a alguien carente de cultura o Inseguro para esa situación o estado de falta de seguridad.
Se nos hizo creer que la información lo es todo, pero al carecer de formación el conocimiento crea fanáticos, que se mueven a espasmos yendo de un extremo a otro, que cambian de ideología constantemente, que se adosan al primer iluminado de turno, que etiqueta y juzga a sus semejantes sin molestarse en conocerlos, alguien carente de criterio y sentido de la responsabilidad, alguien en definitiva, ignorante, temeroso y lleno de prejuicios. Una persona así, es irresponsable, carece de voluntad propia, se limita a poner el piloto automático en su mente y cree ciega y radicalmente a cualquiera que le argumente medianamente bien cualquier cosa.
Estoy acostumbrado a encontrarme personas muy bien informadas, pero que rápidamente se radicalizan en cuanto tocas y descuadras, aquello en lo que simplemente creen, no son personas que estén acostumbradas a tomar y soltar, solo tragan y tragan información, lo que genera un conflicto de intereses en sí mismos. Un exceso de información en una mente no formada, crea integristas.
Alguien formado escucha, tiene la sana costumbre de dudar y replantear sus propias dudas, no se ata a nada y fácilmente va mutando el conocimiento que tiene, para adaptarlo a nuevas formas de conocimiento, esto genera capacidad de pensamiento abstracto, con lo cual es capaz de unir conceptos que en apariencia poco o nada tienen que ver.
Esto es lo que comúnmente se conoce como una mente abierta, la cual está lo suficientemente impermeabilizada, como para saber qué y que no debe empapar sus neuronas.
Tratar el conocimiento sin apego y tener pensamiento analítico y abstracto es altamente necesario para poder decir que estas formado por ese conocimiento, y aplicarlo de forma sabia, de lo contrario, solo retienes datos que con el tiempo solo te fanatizan. La sabiduría no es más que la correcta integración y aplicación del conocimiento. El conocimiento usado como un elemento de consumo más dentro del sistema, es contraproducente a la vista de los resultados, ya que el hombre oscuro, ignorante y medieval, sigue vivo a pesar de estar totalmente informado.
Ahora la Información campa a sus anchas, es fácil acceder a cualquier dato, pero si todos esos datos no te forman y no te obligan a realizar un cambio en tu mente, es que solo eres un creyente o un crédulo, con lo cual tarde o temprano, solo serás un arma arrojadiza más dentro del fanatismo, diseñado, fabricado y disparado por esos a quienes crees combatir.
Recuerda que no todo el conocimiento que vive en este sistema existe para liberarte, no por estar bien argumentado tiene que ser cierto y no olvides que cuando algo se populariza es porque interesa y beneficia al propio sistema. Deja de permitir que tus manos sean las ejecutoras de sus planes, de qué sirve la lucha si sus armas ya nos han matado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario