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Las personas con predisposición a sentir ansiedad, ya sea ansiedad generalizada, social o de otro tipo, tienen también algunas características de personalidad que no son tan negativas en absoluto y que incluso pueden llegar a ser un tanto sorprendentes.
La ansiedad es uno de los trastornos más comunes en todo el mundo. En Estados Unidos afecta al 18% de las personas y, aunque a veces se manifiesta con una intensidad que puede llegar a perjudicar seriamente la vida y relaciones de una persona, también puede tener efectos positivos e inesperados.
Estos son los resultados de algunas investigaciones que nos muestran que las personas propensas a la ansiedad pueden tener algunas ventajas sobre el resto de las personas:
Inteligencia verbal.
Un estudio realizado por la Universidad de Grant MacEwan mostró que las personas con una mayor tendencia a preocuparse y rumiar sus preocupaciones (algo que suele ser típico en la ansiedad y la depresión) tienen una inteligencia verbal más alta que el resto.
Centinelas: la detección de amenazas.
La teoría de la defensa social de Ein-Dor afirma que, en situaciones de amenaza, las personas con altos niveles de ansiedad de apego (ansiedad relacionada con lavinculación afectiva) detectan con más rapidez la presencia de esa amenaza y avisan enseguida a los demás. Un estudio publicado en el European Journal of Social Psychology pudo confirmar esta teoría: las personas más ansiosas se veían menos afectadas por las distracciones que pusieron en su camino y se retrasaban menos la hora de entregar un mensaje de advertencia.
Empatía.
Un estudio publicado por el National Institutes of Health mostró que las personas con ansiedad social tienen una mayor capacidad para detectar y reconocer lo que están sintiendo los demás. Es decir, muestran una mayor capacidad de empatía debido a que presentan una mayor sensibilidad y están más atentos al estado emocional de los demás.La ansiedad de apego está relacionada con la hipervigilancia y con respuestas intensas ante la amenaza. Por tanto, los grupos humanos pueden verse beneficiados por este tipo de personas con tendencia a actuar como “centinelas”, tal y como sucede entre los perritos de las praderas, como el de la foto, que vigilan por el bien del grupo y los avisan enseguida ante la presencia de cualquier amenaza.
Conducta prosocial.
Las personas con mayores niveles de ansiedad social suelen tener una mayor tendencia sentirse avergonzadas. Aunque esta emoción suele vivirse como desagradable, las personas que la experimentan son percibidas por los demás como más dignas de confianza y prosociales.
Cinco estudios demostraron esta hipótesis. El estudio 1 mostró que las personas que se avergüenzan más son más prosociales y más generosas que el resto. Los otros 4 estudios mostraron que los demás perciben a estas personas como más prosociales y están más dispuestos a unirse a ellas y a darles recursos porque las consideran dignas de confianza.
Es decir, las personas suelen reconocer en los demás las señales que muestran que están avergonzadas y las interpretan como un signo de comportamiento prosocial, preocupación por los demás y compromiso con las relaciones sociales.
Motivación.
Cierto nivel de ansiedad puede hacer que las personas estén más preparadas para afrontar los retos y, por tanto, tengan más probabilidades de tener éxito. Por ejemplo, se prepararán mejor para hacer un examen, se esforzarán más para hacer ciertas tareas, irán mejor preparados a una entrevista de trabajo, estarán más preocupados por causar una buena impresión, etc.
Por supuesto, a pesar de los efectos positivos que pueden acompañar a la ansiedad, no deja de ser cierto que un nivel elevado puede tener un efecto negativo y perjudicar muchos aspectos de nuestras vidas, como el profesional o las relaciones personales y llegar a ser un obstáculo para alcanzar metas y hacer realidad algunos de nuestros sueños.
No obstante, si sabes de qué manera puede beneficiarte la ansiedad, serás capaz de relacionarte con ella de un modo más positivo.
Ten en cuenta que, con frecuencia, una persona agrava sus síntomas de ansiedad al interpretarla como algo absolutamente indeseable (es decir, como consecuencia del modo en que se relaciona con ella). Al percibirla de un modo más positivo, como una predisposición de tu personalidad que tiene aspectos tanto positivos como negativos, podrás sentirte mejor por ser como eres y centrarte más en desarrollar los aspectos positivos y dar menos importancia a los negativos.
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